¿Buscas una forma de conectar con los compradores de manera emocional antes incluso de que prueben lo que han adquirido en tu tienda? ¿Te has parado a pensar que el packaging es la primera impresión que tienen los clientes sobre tu producto? En un mundo cada vez más visual, la estética lo es todo. No pierdas oportunidades de negocio y cuida de cada detalle. No es solo un trozo de plástico o cartón. Con el empaquetado cuentas quién eres y cuál es tu historia.
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El envase hace que tu producto destaque en las estanterías de las tiendas
Si distribuyes en tiendas físicas, tienes a tus competidores muy cerca. Se encuentran exactamente a centímetros. Un colorido llamativo, una forma de presentar el producto original o un envasado sostenible pueden ayudarte a destacar sobre el resto. Dedica cierto tiempo a conocer quién es tu cliente y qué valores tiene. Cruzando esa información con lo que está haciendo la competencia te darán las pistas que necesitas.
Diferénciate en apariencia y conseguirás que la percepción de lo que vendes sea también la de algo especial. Este efecto es muy visible en las empresas de cosmética. Productos muy similares pueden venderse como de lujo o económicos según la manera en la que se presentan.
La presentación del producto te ayuda a contar tu historia al consumidor
El diseño gráfico que eliges para acompañar el envoltorio, así como la forma y la composición del mismo puede ayudarte a contar tu historia como empresa. Si para ti es importante la sostenibilidad, la responsabilidad social o la ecología, todos los elementos que lo componen pueden servir para transmitir esos valores.
Si, por ejemplo, vendes una línea de productos alimenticios que vienen de cultivos sostenibles y fomentan la economía circular, tienes muchas maneras de contarlo. Puedes sustituir los plásticos por alternativas biodegradables y minimizar la cantidad, elegir tonos naturales o tintas ecológicas para ofrecer un valor añadido o utilizar el paquete como soporte para contar tu historia, entre otras ideas. Lo importante es que elijas correctamente estos elementos para realzar tu marca.
El empaquetado puede hacer tu producto más funcional
Con un diseño del empaquetado adecuado puedes solucionar problemas de funcionalidad en el uso de tu producto. Poniéndote en el lugar del cliente serás capaz de detectar las limitaciones que tiene y darles solución de manera creativa. Esto mejorará la experiencia de uso y, en consecuencia, el consumidor sentirá más afinidad con tu empresa.
Dos ejemplos muy claros en el sector de la alimentación son las ensaladas que vienen preparadas y en formato bol. Con el envasado no solo se soluciona el problema de contener el producto, también le permiten al consumidor tomarlas fácilmente en cualquier lugar sin tener que cambiarlas de sitio o emplear platos. Por otra parte, los benjamines de cava y champán que vienen con un aplique en forma de copa, ofrecen una experiencia más lujosa y te dejan tomarlos en cualquier sitio sin tener que beber directamente de la botella.
Los envoltorios te ayudan a cuidar el medioambiente
En la actualidad, es indudable que existe una fuerte tendencia hacia un envasado muy minimalista. Lo ideal es mantener recipientes y envoltorios bajo mínimos para evitar generar residuos innecesarios. En este sentido, si tu estrategia es comunicar la sostenibilidad, puedes aprovechar toda la superficie disponible de los contenedores.
Un claro ejemplo de esto lo vemos en muchos productos de parafarmacia. En lugar de introducir un prospecto con las instrucciones de ciertos productos, aprovechan el interior de las cajas para incorporarlo. Con esta forma creativa, estarías ofreciendo todos los datos y, al mismo tiempo, reduciendo considerablemente el gasto.
El packaging te ayuda a crear una experiencia
Las marcas cada vez están más basadas en intangibles y en la conexión emocional con los clientes. Por lo tanto, pensar en la experiencia que estos tienen cuando prueban o utilizan tu producto te ayudará a conectar con ellos de una forma especial. Aspectos como la anticipación, la ilusión, o el hedonismo se pueden resaltar con la presentación que eliges para tus productos.
Esto es muy visible cuando compramos artículos de lujo. Todas las firmas tienen un modo específico en la que envuelven sus productos, con cajas y bolsas personalizadas. Incluso papeles con aroma. Cuando compras en sus tiendas, no solo disfrutas de lo que acabas de adquirir. Llegar a casa y abrirlo también es una experiencia. Aunque este no sea tu sector, puedes tomar ideas de cómo trabajan el empaquetado en este sentido y aplicarlas a tu negocio.
En definitiva, el packaging es mucho más que un soporte o recipiente en el que depositas tu producto. Es una poderosa herramienta de marketing a través de la cual podrás transmitir sensaciones, emociones y crear toda una experiencia. ¿Te gustaría aplicar estas y otras ideas en tus productos? Ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos a conseguirlo.