Hay un error en el que suelen caer muchas marcas: greenwashing. Hoy, en nuestro blog, vamos a desmenuzar por qué incluir una etiqueta verde no es ser sostenible. Puedes estar de acuerdo o no, pero es una práctica ya muy manida.
Los consumidores actuales, especialmente aquellos que se preocupan por el medio ambiente, buscan mucho más que un simple sello ecológico en el empaque o una promoción que resalte un producto verde. Este tipo de estrategias, aunque pueden atraer en un primer vistazo, rara vez generan la conexión profunda que el consumidor eco-conscious espera.
El desafío es claro: los consumidores no solo quieren productos que sean respetuosos con el medio ambiente, también exigen transparencia y quieren que las marcas con las que se relacionan compartan sus valores y les eduquen sobre el impacto real de sus decisiones de compra. Entonces, si pensabas que para vender productos eco-friendly solo necesitabas colocar un sello verde o lanzar una promoción, estás cometiendo un grave error.
Así que si quieres destacar de forma sostenible en el punto de venta, no te puedes perder este artículo en el que te detallamos tres estrategias clave para conectar con el consumidor eco-conscious.
Contenido
1. Diseño de packaging responsables que cuenten tu historia
El empaque de un producto es uno de los primeros puntos de contacto entre la marca y el consumidor, por lo que debe ser mucho más que un simple envoltorio. Para conectar con el consumidor eco-conscious, el empaque debe transmitir una historia clara y auténtica sobre el compromiso de la marca con el medio ambiente.
El uso de materiales biodegradables, reciclables o reutilizables no solo demuestra que la marca tiene un enfoque responsable, sino que también brinda una oportunidad única para comunicar los valores y acciones sostenibles de la empresa. Los empaques pueden destacar detalles como:
- El proceso de fabricación sostenible del producto.
- El origen ético de los materiales.
- Cómo la marca está reduciendo su huella de carbono o promoviendo la economía circular.
Por ejemplo, imaginemos una botella de detergente biodegradable que no solo cuente con un diseño innovador y ecológico, sino que además tenga un código QR en la etiqueta. Este código dirige al consumidor a un video o una página interactiva que narra la historia detrás de la producción del detergente, desde la elección de los ingredientes hasta el impacto positivo que genera al desecharlo. Este tipo de detalles convierten una simple compra en una experiencia educativa y emocional para el consumidor.
Al integrar estas historias en el empaque, logras que el consumidor sienta que está tomando una decisión informada y responsable, lo que genera una conexión más profunda y auténtica con la marca.
2. Promociones alineadas con la sostenibilidad
Las promociones en el punto de venta suelen enfocarse en el precio o en descuentos, lo cual no siempre es la mejor estrategia cuando se trata de productos sostenibles. En lugar de ofrecer rebajas que desvaloricen el producto, es importante crear promociones que refuercen el impacto positivo que la compra de estos productos tiene en el medio ambiente.
Un error común es creer que el consumidor eco-conscious tomará decisiones de compra solo por una oferta. Lo que realmente resuena con ellos es comprender cómo su compra puede ser una acción concreta en favor del planeta. Por ello, las promociones deben ir más allá del simple ahorro económico y enfocarse en el valor añadido de la sostenibilidad.
En Servicios Reunidos, hemos llevado a cabo promociones en el punto de venta en la que se ofrecía al consumidor la posibilidad de participar en iniciativas ambientales a través de su compra. Por ejemplo, por cada botella de agua vendida, la marca podría comprometerse a plantar un árbol o a donar a una organización que trabaje en la preservación de ecosistemas. Este tipo de promociones refuerzan la idea de que al comprar el producto, el consumidor está contribuyendo a una causa mayor.
Además, es fundamental que las promociones expliquen claramente el impacto positivo que tiene el producto en el medio ambiente. Esto puede hacerse a través de gráficos, textos claros y sencillos, o incluso con el uso de pantallas interactivas en el punto de venta. La clave es educar al consumidor sobre cómo su compra puede hacer la diferencia, y hacerlo de manera auténtica.
3. PLV que educa y compromete
La Publicidad en el Punto de Venta (PLV) no debe ser subestimada cuando se trata de productos sostenibles. Más allá de exponer el producto en los estantes, es esencial utilizar el PLV para educar al consumidor y destacar cómo su elección de compra tiene un impacto directo en la protección del medio ambiente.
Los consumidores eco-conscious quieren entender por qué y cómo ese producto es mejor para el planeta. Aquí es donde las herramientas de marketing en el punto de venta juegan un papel protagonista. Elementos como exhibidores informativos, carteles interactivos y demostraciones en vivo pueden proporcionar el contexto necesario para que el consumidor se comprometa emocional y racionalmente con la marca.
Ahora bien, ¿cómo podemos orientar el PLV al consumidor eco-conscious? En Servicios Reunidos hemos seleccionado 5 estrategias ganadoras:
- PLV informativa y visualmente clara: gráficos sencillos, etiquetas claras y materiales informativos que expliquen cómo el producto contribuye al cuidado del planeta, ya sea en su fabricación, uso o eliminación. Además, es crucial que la PLV sea visualmente atractiva y directa, destacando los beneficios sostenibles del producto de manera clara y concisa.
- Mensajes basados en la transparencia: ofrecer detalles específicos sobre cómo el producto es sostenible. Evita afirmaciones generales como “100% eco-friendly” sin contexto, y en su lugar, usa mensajes que detallen el porcentaje de materiales reciclados o los métodos de producción que ahorran energía y recursos.
- Conectar emocionalmente a través del storytelling: puedes incluir detalles sobre el origen de los ingredientes, los procesos de fabricación éticos y cómo la compra de ese producto contribuye a causas ambientales. Esto no solo educa, sino que también genera una conexión emocional con el consumidor, haciéndole sentir que su compra tiene un impacto real.
- PLV interactiva para involucrar al consumidor: las herramientas interactivas, como pantallas táctiles o códigos QR, pueden ser un recurso poderoso para educar al consumidor de manera más dinámica. Imagina una pantalla interactiva que muestre cómo el uso de un producto biodegradable reduce la contaminación, o una demostración en vivo que compare los beneficios ambientales de un producto sostenible frente a su versión convencional.
- Incentivar acciones sostenibles en el punto de venta: fomentar acciones responsables en el mismo punto de venta, como estaciones de reciclaje para envases vacíos o incentivos para la reutilización. Esto no solo refuerza el compromiso de la marca con el medio ambiente, sino que también motiva al consumidor a participar activamente en la sostenibilidad.
En resumen, para conectar con el consumidor eco-conscious en el punto de venta, las marcas deberán contar su historia de manera clara y honesta, educar sobre el impacto positivo de sus productos y utilizar el punto de venta para crear experiencias que refuercen su misión ambiental.
Si logras que tu consumidor se sienta informado, empoderado y comprometido con tus valores, estarás mucho más cerca de ganar su confianza y lealtad.
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